PAU llegó a las instalaciones de S´Aigua Blava en el año 2000 a la edad de un año con diagnóstico de parálisis cerebral atetósica.

Los médicos especialistas pensaban que el ejercicio en la piscina podría aumentar su distonía, contrariamente, Pau se ha beneficiado del ejercicio en la piscina desde el primer día ayudándole no solo físicamente sino también socialmente.

Tanto el trabajo como la atención por parte de los profesionales de este Centro con PAU han sido excelentes, destacando por su implicación y dedicación a Margalida Forteza Far.