La liberación miofascial es una terapia dirigida a las fascias, aunque indirectamente también actúa sobre otras estructuras del aparato locomotor. Antes de comenzar debemos explicar que son las “fascias”, las cuales las podemos definir como “membrana fibrosa, blanquecina y resistente, que sirve de envoltura a los músculos y órganos internos”, esta envuelve, los músculos, huesos, articulaciones, vísceras y estructuras nerviosas y vasculares. Además tiene otras funciones como organizar y separar compartimentos corporales, dar protección y sostén a la estructura corporal o colaborar en procesos de termorregulación y curación de heridas. En resumen nos proporciona un sostén funcional.

Este tejido tiene un gran contenido de colágeno que puede sufrir acortamiento y endurecimiento cuando determinadas fuerzas actúan sobre él, pero lo que debemos tener muy presente es que  la lesión en una parte de la fascia puede causar alteraciones en otras zonas distantes a través de las compensaciones que hace el cuerpo para recuperar su equilibrio y mantener sus principios de economía y no dolor.

¿QUÉ ES LA LIBERACIÓN MIOFASCIAL?

Se trata de una estimulación mecánica del tejido conectivo, logrando una eficiente circulación, aumentando el suministro sanguíneo lo que implica un incremento del flujo de metabolitos desde y hacia el tejido, acelerando el proceso de curación.

La autoliberación miofascial se realiza con un rodillo de espuma, y  es posible gracias al principio conocido comoinhibición autogénica,

EJERCICIOS PARA COMENZAR

  • Glúteo mayor

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  • Cuadriceps
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  • Femoral
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  • Gemelos
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  • Banda iliotibial y Tensor de la Fascia Lata
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Los principales beneficios de este aparato son:

  •  Relajar los músculos hipertónicos.
  • Preparar el músculo para el esfuerzo.
  • Mejorar la circulación de deshechos.
  • Eliminar adherencias y contracturas.
  • Aliviar puntos gatillo (activos o latentes).

Un aspecto importante, es rodar solamente el músculo, sin llegar a las artículaciones o huesos. Es aconsejable dividir los músculos por zonas, por ejemplo comenzar por la parte alta del gemelo, después la parte central y finalmente la parte más distal del mismo, ya que así notaremos más el trabajo, que si por ejemplo rodamos por todo el gemelo en la misma repetición.

 

Si tienes dudas de cómo realizar los ejercicios no dudes en consultar a un técnico ILLES.