Estamos hablando con mucha regularidad de los últimos avances y nuevas tendencias del entrenamiento tanto al aire libre como en centros de fitness, pero cuando vamos a los orígenes podemos ver que el hecho de trabajar con peso para mejorar la condición física no es, precisamente, nada nuevo.

Ya en la antigua grecia, gente como Milón se dedicaba a cargar un ternero como forma de entrenamiento, así como contemporáneos suyos se dedicaron a crear los primeros “antepasados” de las mancuernas dentro de los primeros terrenos conocidos como “gimnasios” (centros de la época donde se realizaban movimientos deportivos desnudos y competiciones en honor a los dioses así como charlas filosóficas). Por otra parte, en la antigua Persia se trabajaba con el conocido como Garrote Hindú para entrenar la fuerza.

Las mancuernas y barras como las conocemos actualmente datan de finales del S. XIX siendo Jack LaLane y Sandow (marcado posteriormente como padre del culturismo moderno y muy influenciado por la cultura griega) los pioneros más destacados del hierro. Las máquinas tal y como las conocemos actualmente son producto de la década de los 60, colocando ya mucho más recientemente sistemas de entrenamiento como el pliométrico a mediados de los 90.